Ja, ja, ja... qué lista más organizada, con los asteriscos y todos. De momento, si los que más te gustan a tí son los que están en negrita, borraría los otros.
Yo soy bastante más clásica para los nombres, de todos los que pones
en negrita, los que más me gustan son César y Diego.
Hugo, hoy por hoy, es un nombre muy común, demasiado puesto. Hablo de Granada, claro. Pero bueno, a mí me ha pasado eso con Adrián, que se lo puse al mío y ahora hay Adrianes hasta debajo de las piedras

. En su clase hay otro niño y el maestro, que se llaman Adrián, y en la clase extraescolar de educación física ¡¡otros dos niños además de él!!
Estoy de acuerdo contigo en no ponerle el mismo nombre que el padre. Yo aún voy más lejos, no quiero nombres de nadie de la familia, por eso se me cae César, porque así se llama el hermano de mi marido.