08/06/17 a las 07.10h: la cita sin programas más importante de nuestras vidas. ¡Bienvenido al mundo pequeño Yon!
El día 31 en correas nos dijeron tras hacer tacto que el cuello estaba blando y borrándose y además salieron contracciones destacables en el registro. La verdad es que hasta ese momento solo había notado las contracciones que se te pone la tripa dura y no había tenido molestias diferentes a esas, vamos que aquí una pensaba que pese eso llegaría a la inducción de sobras.
Pasaron los días hasta el día 6 que ya me levanté yo rara. Al incorporarme de la cama noté mucha presión en la parte baja de la tripa y como tirantez, me puse a desayunar tranquila y a ratos esa sensación se repetía estando sentada. Me fui al sofá a ver si tumbada se me pasaba, me quedé medio dormida hasta que me desperté por un pinchazo en la parte baja de los riñones que me dejo sin aire casi, luego he descubierto que eso era una contracción de las "buenas". En ese momento yo ya veía que si no hubiese tenido orden de dejar la heparina ya esa mañana me hubiese tocado visita al médico a ver qué pasaba por ahí dentro. Me pasé el resto de mañana recogiendo un poco las 4 cosas que Yon no había hecho antes de irse a trabajar, lo que diría mi madre "síndrome del nido". A la hora de comer el vino para casa y le expliqué como estaba, se fue un par de horas a la oficina y volvió. Al rato de llegar él empecé con dolores como de regla y sangrado. No tardamos mucho en coger todo "por si" y acercarnos al hospital. No estaba mi gine pero me atendieron de mil amores, estuvimos un par de horas en observación con el registro de contracciones y de frecuencia fetal, hicieron eco y tacto, todo iba bien, el peque tenía un latido enérgico, la bolsa estaba entera y aparecían algunas contracciones leves y otras más fuertes. Nos enviaron a casa en cuanto el sangrado disminuyó casi por completo con 1cm de dilatación y asegurándonos que nos veríamos pronto.
La noche del 6 al 7 dormimos a ratitos, aunque yo con un sueño muy ligero la verdad. Seguía con dolores de regla y algún que otro pinchazo en los riñones. Al amanecer me tomé un zumo y tostadas, me apetecía y quería coger fuerzas. Sobre las 11 largas de la mañana noté un pinchazo en los riñones importante y como me caía un líquido transparente por las piernas, ¡había roto la bolsa! Lo más curioso es que a partir de ese momento las contracciones se volvieron rítmicas cada 10 minutos. Así que nos duchamos con calma y como todo se había quedado en el maletero nos fuimos para el hospital. Al llegar me revisaron: bolsa rota y 2cm de dilatación.
Entramos a sala de dilatación el miércoles a las 15h de la tarde, tenía mi ducha, mi cama y mi pelota para relajarme con las contracciones. Hasta cosa de media tarde estuve más o menos tranquila porque las contracciones iban y venían cada 10-12 minutos. Hubo un momento en que pasaron de ese tiempo a cada 5 minutos y llamamos a la comadrona después de haber aguantado un rato: estaba de 5cm. La verdad es que me sorprendió el haber dilatado de 2 a 5, para mí, viendo el ritmo de las contracciones que había tenido, era mucho.
Fue oscureciendo y las contracciones empezaron a espaciarse en tiempo, en ese punto entré un poco en "pánico" pensando que el parto se parase con bolsa rota ya que me parecía estar yendo bastante bien hasta ese momento, de hecho a media noche estaba en 7cm. Para mi tranquilidad las contracciones empezaron a acelerarse entre ellas y en poco rato acabé teniéndolas cada 2 minutos o menos. En ese momento decidí entrar a la ducha con mi pelota y ayuda de Yon y la matrona. Conseguí aguantar con el agua caliente y masajes de Yon hasta casi las 4 de la mañana, que pedí la walking-epidural en la dosis mínima posible. Tuve que ir a la cama para que me la pusieran, todo sea dicho pasando un mal rato ya que con las contracciones tan seguidas, sin casi poder coger aire y sin moverte te ves algo agobiada. Debo decir que me tocó llevar antibiótico por la vía por el tema de la bolsa rota por protocolo.
Poco rato después de poner la epidural empecé a notar que el dolor disminuía hasta hacerse soportable y ser más la presión que el dolor. Recuerdo un momento en que empecé a sentir mucha más presión en los riñones y no cedía, como una contracción muy larga, y vi que manchaba más de líquido con abundante sangre. Avisamos a la matrona y al hacer tacto: 10 cm. Estaba totalmente completa. Me pusieron en la camilla de un lado para ayudar a que el peque bajase más, ya que estaba un poco alto. Yo creo que fue cuestión de media hora hasta que empecé a notar que la presión en los riñones subía y subía. Apareció una gine jovencita que me había atendido alguna vez y la matrona: estaba ya en completo y con mi pequeño encaminado ya para salir. Fueron unos 20 minutos, los más intensos de mi vida, empujé varias veces, noté ese quemazón al salir la cabeza de mi Petisui y poco después lo oímos llorar y lo noté sobre mi pecho. Yon padre le recitó al oído una sura corta (es como una parte de nuestro libro sagrado que se suele recitar a los peques cuando nacen). En ese momento fui consciente plenamente de que soy mamá.
Decidimos dejarle hacer agarre espontáneo al pecho, la verdad es que tardó algo pero luego se enganchó solito con un pelín de ayuda de la matrona que me corrigió postura y por el momento sigue enganchándose de maravilla. Me dieron 5 puntos que se caerán solos. El peque finalmente pesó 3,400kg y midió 49cm. Y solo puedo deciros que ahora veo toda la búsqueda como algo lejano, el embarazo más bonito aún de lo que ya me pareció, y mis días, mi vida, ahora están 100% completos de amor y dulzura. Si es que me pasaría horas y horas mirándole como una boba. ¡Pensar que haya salido de mí un bb tan precioso!
(PD: he tenido que escribirlo en un Word por trozos hasta poder tenerlo completo, es muy cierto que un bb te requiere el 100% de tu tiempo
)