Diario,
No sé si soy yo que me he levantado con el pie izquierdo, que Shamu hoy está gruñón o las dos cosas! La verdad es que las cucarachas nos tienen desesperaditos!
Hace un mes y pico, al atardecer, empezamos a encontrar bichitos pequeños en el suelo de la cocina. Como era justo cuando empezó el calor…pensé que era por eso. Eché un insecticida convencional y arreando. Al día siguiente, aparecieron más bichitos. Los volví a matar y al día siguiente, más!!. De día no habían, pero en cuanto la cocina se quedaba a oscuras… aparecían por todas partes! Al levantarme una noche a por agua…le dije a Shamu que había que hacer algo con esos bichos del suelo, que no me parecían normales, que habría que averiguar de dónde salían.
Al día siguiente, viernes, antes de salir del trabajo, me llamó Shamu:
“Cariño, lo que tenemos son cucarachas!! He retirado un poco la nevera… y no veas lo que tenemos ahí, se están atrincherando! Súbete Cucal YA!! Y dos botes!!” Dios mio, pero ... QUE ASCO!!!!!! Mi cocina!!! Llena de cucarachas!!!! QUE BICHO MÁS REPUGNANTE!!!!! Yo no quería ni subir a casa. Fui a comprar el Cucal y al llegar a casa le dije que ni hiciera comida ni nada, que se pusiera a matarlas todas, que yo me iba por ahí y cuando ya no estuvieran me llamara.
Dice que cuando apartó la nevera … por detrás…. cienes y cienes de bichos empezaron a corretear por el suelo, grandes, pequeños, medianos, con huevos en el culo….Empezó a disparar Cucal hacia todas las direcciones… por el suelo, la pared… la nevera…los cables... el mueble… Madre mía, me lo contaba y yo me quería morir de ganas de devolver. Si habían tantas ¿Pero cómo no las habíamos visto antes por la cocina? Además, fue tal la cantidad de insecticida que echó… que el pestazo a Cucal que había en toda la casa duró varios días. En aquel entonces, aunque no lo sabía, yo estaba embarazada y con lo fino que tenía el olfato… te imaginaras,
diario!
Desde ese día andamos a la caza y captura de cucarachas. Parece ser que es el puto bicho más difícil de eliminar y doy fe de ello. Aunque ya muchísimas menos, seguíamos encontrando supervivientes cuando nos levantábamos por la noche a la cocina. Así que otro día… cual cazador buscado a su presa… las observó y se dio cuenta que se estaban metiendo en el zócalo metálico de la cocina. Mascarilla y guantes en mano y de nuevo presto para combatir con el enemigo. Ahí sacó otras cuantas. Las muy cabronas habían puesto huevos con intención de conquistar a mi cocina en un segundo ataque. Se meten en todos los agujeros que encuentran, grietas, huecos en las paredes…
La cocina no es muy grande, y aparte de gasear las zonas con posibilidad de huevos, tengo repartidas 6 trampas con feromonas. Todas las noches, me dejo el Cucal preparado para pillarlas infraganti en cuanto quiero ir a beber agua. Cada vez quedan menos, pero los asquerosos bichos no terminan de desaparecer. Por lo menos, me consuela saber que sólo las veo por el suelo porqué si las llego a ver por la encimera, echo la cocina abajo!
Son curiosas las conversaciones entre Shamu y yo a media noche…
-
Cuantas has visto?
- Hoy solo 3.
- Grandes?
- Una mediana y dos pequeñas
- Las has matao?
- Dos las he pisado, la otra se me ha escapao. Pero está por la trampa.
- Puta… (la cucaracha, claro!).
Anoche me levanté a por agua, y vi 4 repulsivos bichos correteando por mi suelo. Como no me había dejado el Cucal preparado, se me ocurrió coger la aspiradora de mano y las aspiré! Luego me dí cuenta de que las peazo jodias seguían tan panchas corriendo por el interior de la aspiradora, así que… o ellas o yo. Esto es la guerra! Cogí el Cucal, le zumbé un viaje por el agujero de aspirar y le dí al botón. Cuando vi que mis adversarias levantaban las patitas agonizando, triunfante, dejé la aspiradora en la encimera, junto al Cucal y me fui a dormir.
En cuanto se ha levantado Shamu…sospechó algo raro cuando al aspirar las miguitas de pan del desayuno notó que un olor a Cucal se estaba apoderando de la tostadora. Vino a verme, extrañado y le conté el motivo del tufo. Ay la que me ha caído…!! Lleva todo el día sacando la aspiradora a relucir!! Que cómo se me ocurre meterle un soplido a un aparato eléctrico!! Ha tenido que desmontar la aspiradora entera y meterla en el fregadero. Y aún después de limpiarla a conciencia con el Fairy, no se le ha ido el aroma de “
Eau de Cucal” al encenderla. A mi me daba la risa cada vez que me regañaba, y claro, eso le hacía enfadarse más. Si hoy no he oído 30 veces la palabra "aspiradora" no la he oído ninguna! Bien pensado, quizás sí fue una burrada, pero oye…¿maté o no maté a las cucarachas?
"Si las cucarachas sobreviven a un ataque nuclear… ¿qué coño lleva el Cucal?"