Contracciones regulares
El primer síntoma indicador de que el parto está por comenzar son las contracciones uterinas, éstas tienen que ser obligatoriamente muy regulares; muchas embarazadas suelen asustarse al sentir contracciones porque piensan que ya van a tener a su bebé, pero éstas pueden ocurrir durante todo el embarazo de forma irregular. Las contracciones regulares al fin del embarazo se explican porque el bebé es empujado hacia la vagina contrayendo el útero, por este motivo el bebé se va a sentir cada vez más abajo.
Secreciones más abundantes con contracciones uterinas
Se notarán secreciones más abundantes que lo habitual de color rosado pudiendo aparecer rastro de sangre. Por eso es importante controlar las contracciones con un reloj a fin de comprobar que estas aparezcan cada 5 minutos aproximadamente entre una y otra durante una hora y media. Estas provocan un dolor agudo en la espalda similar al dolor premenstrual.
El saco amniótico se rompe
A éste se lo conoce comúnmente como romper aguas o romper bolsa. Puede ocurrir que se rompa eliminando poca o mucha cantidad por la vagina como si estuviese orinando, en ambos casos se debe recurrir de inmediato al médico, hospital o donde se tenga planeado realizar el parto, porque esta rotura por lo general sucede luego de las contracciones pero puede suceder también antes o en el momento del parto. Si el saco amniótico se rompe y las contracciones no aparecen el parto debe ser inducido para prevenir de infecciones al bebé que ya no está cubierto con la protección que le estaba brindando este saco.
La expulsión del tapón mucoso
Otro indicio de que el parto está por comenzar es la expulsión del tapón mucoso, porque puede desprenderse 2 o 3 semanas antes de la fecha probable de parto. Es necesario prestar atención a esta expulsión a fin de saber si va acompañado de las contracciones regulares que indicarían el comienzo del parto. Si se produjera antes de las contracciones sería conveniente una consulta con el obstetra para verificar que el embarazo está siguiendo su curso normal.