La verdad es que ha sido una tarde bonita. El paisaje precioso, una cantidad de castaños impresionante (parecía un paraje de cuento), ha empezado hasta a llover y a tronar y mi marido y unos amigos paseando entre los castañares. Y a cada paso el suelo lleno de erizos de castañas, parecía una niña pequeña en la cabalgata de reyes. Pisotón y a coger las castañas, jajajajaja. Y mi maridito me ha sorpendido quemando casi la vitrocerámica intentando asarme unas castañas, jajajaja que romántico eh???? Estaban muy ricas, pero en las próximas semanas estarán mejor. Os mandaría por SEUR, pero aún o estamos de antojos ehhhhh!!!!!!!!!!!