La infertilidad es la incapacidad que tiene una persona para concebir tras haber pasado un año manteniendo relaciones sexuales sin utilizar ningún tipo de método anticonceptivo.
El tiempo es un concepto relativo, ya que en muchas ocasiones, esperar un año para concebir podría representar demasiado tiempo. Si se trata de una mujer que ha pasado los 35 años o ya tiene 40, no hay tiempo que perder.
Lo primero que debe hacerse es someterse a una evaluación para detectar la causa de la infertilidad.
Recuerda siempre que en la mujer, la edad es un factor de suma importancia que colabora con la disminución de la fertilidad. Tal es así, que apenas el 25% de las mujeres puede lograr un embarazo al pasar los 40 años de edad.
Una mujer posee una cantidad preestablecida de óvulos y los mismos se van deteriorando con el paso de los años, esto hace que a medida que se envejece, se dificulte la posibilidad de concebir. Un embarazo a una edad avanzada aumenta considerablemente los riesgos tanto de aborto espontáneo como de concebir un bebé con anomalías cromosómicas.
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Entre el 80 y el 85% de las parejaslogra concebir durante el primer año de intentarlo, sin embargo, no existe una regla estricta que sostenga que debe esperarse un año para consultar a un especialista, menos aún si se trata de una mujer que ha pasado los 25 años de edad.
Factores como las menstruaciones irregulares o poco frecuentes pueden ser indicadores de problemas de ovulación.
En el caso de los hombres, los mismos también pueden correr el riesgo de haber sufrido algún tipo de enfermedad como paperas en la infancia o la juventud, dando por resultado una producción baja de esperma.
Por otro lado, existen una gran variedad de trastornos médicos que influyen en el desarrollo de los óvulos, la producción del esperma, el transporte del esperma al óvulo, la implantación del embrión en el útero y la permanencia del espermatozoide en las Trompas de Falopio.
Ciertos padecimientos crónicos que afectan a intestinos o riñones podrían producir efectos secundarios como desnutrición y falta de ovulación. Las enfermedades de trasmisión sexual como clamidia o gonorrea también podrían infectar las trompas de Falopio.
En el caso de los hombres, la inflamación de los genitales podría alterar la producción del esperma e incluso obstruir su secreción. Además cierto tipo de medicamentos recetados para ciertas dolencias podrían afectar la producción de esperma y óvulos.
Los medicamentos que se utilizan para tratamientos psiquiátricos, para disminuir la tensión arterial y aquellos para desinflamar los intestinos pueden afectar considerablemente la fertilidad de las personas.
Sin embargo, no debes preocuparte ya que todos estos efectos
pueden revertirse si dejas de consumir estos medicamentos. Es muy importante si has decidido concebir un hijo, que si estás tomando cualquier tipo de medicación, consultes al respecto con tu médico ya que la misma podría influir negativamente en tu proceso de concepción.
Si concebir un hijo se presenta como un desafío complejo, recuerda que es muy importante que tanto tú como tu pareja se realicen un examen médico completo a fin de descartar cualquier factor que podría provocar problemas de fertilidad.
En caso que hubiera algún problema, es fundamental seguir el tratamiento apropiado y en muy poco tiempo serás capaz de lograr el sueño de tu propia familia.
Espero les sirva en caso quiran conocer mas 
Que es la Infertilidad
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