Este año 2011 recién empezaba cuando tu bebé comenzó a vivir, dentro de tu cuerpo, de tu mente y de tus sueños. Será en el mes de octubre cuando llegue el momento tan esperado durante nueve lunas. Mientras tanto, puedes imaginar todos los detalles (sabiendo que de todas formas te sorprenderás). Por ejemplo, ¿ya has pensado qué nombre le pondrás a tu bebé? La elección de un nombre es sumamente importante. En general, el nombre es el primer regalo que recibimos al nacer, y por su significado, nos marca nuestra personalidad y determina nuestra identidad. Por eso, la elección del nombre debe pensarse cuidadosamente y no ser tomada a la ligera.
Al elegir el nombre ten en cuenta el o los apellidos del niño, así como las iniciales, para evitar combinaciones cacofónicas.
Si en tu familia se estila elegir el nombre de tu bebé según el santoral, he aquí algunas de las opciones que podrían tocarte: Gerardo (el 3), Francisco (por San Francisco de Asís, el 4), Bruno (5), Pilar (por Nuestra Señora del Pilar, el 12), Eduardo o Mauricio (13), Lucas (19), Irene (20), etc.
Finalmente, otras personas optan por seguir la tradición familiar repitiendo el nombre de algún ser querido: abuelos, tíos, padres. De todas maneras, si tu familia suele seguir esa costumbre, mantenla sólo si estás de acuerdo, y no simplemente para darles el gusto a los demás. Se trata del nombre de tu hijo, una elección tan personal en la que nadie que no sean tú y tu pareja debería intervenir.