Muy buenos días:
Aquí también hace muy buen tiempo. Lástima que sea San José y tengo dos celebraciones familiares, que si no me hubiera ido a la playa. He mirado el fin de semana que viene y ya no va a ser igual (al menos según los pronósticos).
Adrián le ha regalado a su padre un cuadro que ha hecho en el cole, entre el maestro y él, que viene con un marco de palos de esos de médico pintados por él, y dentro una flor y una poesía que al leerla también me he puesto a llorar (qué sensibles estamos, ¿eh?)
Os la voy a copiar:
Le regalo a mi papá
una sonrisa de plata
que es la que alumbra mi cara
cuando de noche me tapa
Le regalo a mi papá
una colonia fresquita
por no soltarme la mano
cuando me duele la tripa
Le regalo a mi papá
una armadura amarilla
que le proteja del monstruo
que espanta en mis pesadillas
Le regalo a mi papá
el lenguaje de los duendes
por entender lo que digo
cuando nadie más lo entiende
Le regalo a mi papá
una chistera de mago
en la que quepan mis besos
envueltos para regalo
No me digáis que no es para que se te salten unas lagrimillas