Mamás Abril 2011 Comentarios y Dudas

sandrii

El masaje perineal es una técnica que se usa para aumentar la elasticidad y la tonificación de los tejidos perineales o en
preparación para el parto. Un masaje perineal diariamente durante las últimas seis semanas del embarazo pudiera ayudar a
evitar la necesidad de una episiotomía y prevenir o minimizar un desgarramiento. Dándole a los tejidos un masaje con
aceite y haciendo estiramientos debería lograrse una menor resistencia para que salga la cabeza del bebé en el parto.
Además, con estos masajes diariamente, Ud. aprenderá a identificar y a relajar los músculos del piso pélvico para reaccionar
debidamente a la presión que sienta, lo cual le ayudará a tener control para pujar durante el parto de su bebé.
1. El masaje debe ser aplicado diariamente durante cinco a 10 minutos, comenzando seis semanas antes de su fecha prevista
de parto.
2. Ud. misma puede darse el masaje, usando sus pulgares, pero probablemente sería más fácil que en las últimas seis
semanas del embarazo sea su esposo o compañero quien se los aplique conjuntamente con Ud. Asegúrese de que su
vejiga esté vacía y que Ud. esté recostada y apoyada contra unas almohadas de manera cómoda. Al principio, cuando
esté comenzando, Ud. pudiera encontrar que un baño tibio le suaviza sus tejidos. Use un espejo las primeras veces de
modo que Ud. pueda familiarizarse completamente con esta área.
3. Lávese sus manos antes de comenzar el masaje. Use para el masaje un aceite natural (vitamina E, aceite de almendra
o aceite para masaje sin aroma) aplicándolo hacia los tejidos perineales y en la parte inferior de la pared vaginal.
Calentar el aceite un poco, antes del masaje, pudiera ayudar. Préstele atención especial a cualquier cicatriz que pueda
haber en los tejidos debido a episiotomías o desgarramientos anteriores.
4. Para ayudarla, su compañero le coloca ambos dedos índices (o coloque Ud. sus pulgares) cerca de tres pulgadas dentro
de la vagina y presiona hacia abajo hacia el recto. Manteniendo esta presión uniformemente, mueva los dedos
hacia arriba a lo largo de los lados de la vagina en un movimiento rítmico en forma de ‘“U.”
5. Para ayudarla, su compañero le estira suavemente la apertura vaginal, lo más abierta que pueda cada vez, hasta que
Ud. sienta una sensación de hormigueo o de ardor lo cual indica que es “suficiente ya.” Esto pudiera ayudarla a
reconocer la sensación de ardor que le indicará que deberá parar de pujar para dejar que la corona de la cabeza del
bebé se deslice hacia fuera.
6. Mantenga este estiramiento, sin llegar al punto de dolor, durante un minuto, luego descanse. Aplique un masaje con
más aceite, haga el estiramiento de nuevo hasta el máximo que pueda aguantar y luego descanse.
7. Al principio, Ud. sentirá sus tejidos apretados, pero con el tiempo y con la práctica, los tejidos se relajarán y se estirarán.
Si el masaje se aplica con regularidad, su compañero podrá insertarle más dedos y aplicar más presión en la
medida en que Ud. se va acercando a la fecha prevista del parto y sus tejidos perineales se van haciendo más elásticos.
Esto es una garantía de que sus tejidos están flexibles y le crea la confianza de que la cabeza del bebé podrá pasar
bien con seguridad.
8. Realice un ejercicio Kegel. Sienta lo difícil que es lograr el estiramiento cuando Ud. tiene tensos los músculos del piso
pélvico. Aflójelos a conciencia mientras su compañero (o Ud. misma) hace el estiramiento. Recuerde hacer sus ejercicios
Kegel antes y después del nacimiento de su bebé, a fin de mejorar la fortaleza y la tonificación.
MASAJE PERINEAL