Respuesta: Mamás Noviembre 2012, Comentarios y dudas.
Leshu, una preguntilla: ¿entonces, nunca diste el pecho a tu hija en la calle? Quiero decir, si salías a pasar el día y a tu hija le entraba el hambre, ¿no le dabas la teta donde te pillara?
A mí personalmente, no me importa que me vean la teta mientras le dé el pecho. Vamos, que no me voy a exponer a que me vea todo el mundo, pero tampoco me voy a esconder: si me pilla en la calle y mi lenteja tiene hambre, le daré su teta sin ningún problema.
Lo que no me gusta y realmente me crispa, es que todas las personas de cierta edad que han sido ya madres se piensan que ellas lo saben todo y te pueden estar todo el día diciendo cómo se hace todo: cómo le tienes que enchufar la teta, cómo le tienes que agarrar para bañarlo, que llora porque tiene hambre, que le pongas más ropa que se te va a enfriar…. Buffff! Pero bueno, me queréis dejar ir experimentando y aprendiendo por mí misma. ¿Quién ha aprendido a patinar sin caerse ninguna vez? Nadie, verdad? Pues con el bebé igual: con la práctica iremos conociéndonos el bebé y yo, y ya nos iremos entendiendo poco a poco.
Yo a mi madre la adoro: no la cambiaría por nada del mundo. Pero es muy servicial con nosotros y a veces da demasiado y eso agobia. Todavía no he hablado mucho de cuando el bebé llegue a casa: lo quiero hacer poco a poco, para que tampoco le siente mal. Por ahora sólo le he dicho que nada de venirse a dormir a mi casa ni nada: como mucho lo que le hizo su madre a ella, es decir, los primeros días venir a mi casa con la comida y recogerle un poco la casa; pero nada de estar 24h. Pero según se acerque el momento le diré muy suavemente, que seguro que con la nueva situación estaré un poco nerviosa hasta que le coja el tranquillo, pero que no quiero que se dedique a instruirme todo el rato, que me deje hacer aunque me equivoque, y que si yo lo considero le preguntaré la duda que tenga, pero que no me agobie “enseñándome” a hacer todo y así evitaremos discusiones. Pero bueno, poco a poco, ya irá llegando el momento de esa conversación.
Por cierto, limoncito, yo creo que ningún extremo es bueno, y quizá lo de la matrona está bien, pero tanta frialdad con las abuelas y demás… a mí me parece demasiado.
Moulin, tranquila. Que sólo te quedan unas horitas de ná! Ya verás cómo está todo estupendo! Luego nos cuentas, vale?
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