Es de valientes reir cuando el corazón llora

Thais

Querido diario:

Verdaderamente, cuando Shamu se ponía payaso, era tremendo. Al verle hacer el idiota me uní a su causa y me arrimé a su micrófono-pimiento para cantar con él…

- Stil loving yuuuuuuuuuuuuuuu….
- Jajajjajajajajajajj Cantas fatal!!! Que lo sepas - dije yo
- Bueno, pero le pongo empeño, no me dirás que no! – contestó Shamu
- Sí, eso sí! Jejeje. Qué le queda a la comida? Te ayudo en algo? – pregunté
- No, no te preocupes. Estoy haciendo un arroz con verduras y salchichas. Le quedan 15 minutos de chup-chup y ya comemos.

En el discman comenzó a sonar otra canción:Vivir sin aire, de Maná. El corazón me dió un vuelco al escucharla pues era una de mis canciones preferidas y que más me recordaban a Shamu.

- Ufff…. Esta me encanta…- dije yo subiendo el volumen al máximo. La música invadía toda la estancia….Había escuchado esa canción cientos de veces, sabía la letra de memoria casi sin ser consciente de ello, me puse a cantar como si estuviera completamente sola, disfrutando y viviendo esas notas musicales…

Cómo quisiera poder vivir sin aire
Cómo quisiera vivir sin agua
Me encantaría
Quererte un poco menos
Cómo quisiera poder vivir sin ti

Pero no puedo siento que muero
Me estoy ahogando sin tu amor

Cómo quisiera poder vivir sin aire
Cómo quisiera calmar mi aflicción
Cómo quisiera poder vivir sin agua
Me encantaría robar tu corazón

Cómo pudiera un pez nadar sin agua
Cómo pudiera un ave volar sin alas
Cómo pudiera la flor crecer sin tierra
Cómo quisiera poder vivir sin ti

Pero no puedo siento que muero
Me estoy ahogando sin tu amor

Cómo quisiera poder vivir sin aire
Cómo quisiera calmar mi aflicción
Cómo quisiera poder vivir sin agua
Me encantaría robar tu corazón

Cómo quisiera lanzarte al olvido
Cómo quisiera guardarte en un cajón
Cómo quisiera borrarte du un soplido
Me encantaría matar esta canción

Paseaba distraída por el saloncito mirando los cuadros, la chimenea, los folletos a la vez que me balanceaba al son de la música ensimismada en la música, como si no existiera nada más que yo y la música en esa habitación. Me parece una de las canciones más bonitas que se han compuesto y cuando la oigo, siento que el mundo se para en un instante. Me invade el deseo irrefrenable de dejar cualquier cosa que esté haciendo sólo para concentrarme en escuchar este tema . Realmente, adoro esta canción…

Mientras me mecía al son de la música mirando a lo lejos por la ventana noté unas manos tras mi espalda en mi cintura y solté un respingo sobresaltada dejando de cantar…Tan ensimismada estaba con la música que no había percibido que Shamu se había acercado a mí.

- Shhhh… – susurró dulcemente – Ven…baila conmigo…

Shamu me giró y me cogió entre sus brazos, y abrazándome comenzamos a balancearnos al unísono, al ritmo de las notas del grupo mejicano. Durante unos segundos nos miramos a los ojos. Me quedé hipnotizada con la visión de Shamu sonriéndome con mi canción preferida de fondo. ¿Era un sueño? Su brazo derecho se desplazaba suavemente por mi espalda, acariciándome. Su otro brazo apresaba mi mano en su corazón. Podía sentir sus latidos, un bum bum acelerado que tal vez estuviera destinado a mí. Sentía el olor de su perfume. Ese olor que tanto me fascinaba. Estábamos cuerpo a cuerpo, en silencio, danzando y columpiándonos lentamente al ritmo de la canción. No quería mover ni un solo pelo de mi cabeza, sólo dejarme llevar por él. Por unos minutos, el tiempo se paralizó, sólo existíamos él y yo. Nada más. Cerré mis ojos. Necesitaba grabar cada segundo de ese momento en mi mente. Sentí que jamás nada malo me sucedería, que nadie me haría daño. Deseaba que el mundo dejara de girar en ese mismo instante…

Pero a mi pesar lo único que se detuvo fue la música. Nos quedamos durante unos segundos abrazados. Dios… no puede ser… no quiero separarme… No quería abrir los ojos. Sabía que si lo hacía encontraría ahí esos oscuros ojos mirándome y no sabía cómo reaccionar al encontrármelos.

Shamu sin dejar de abrazarme, me agitó tiernamente buscando mi cara con sus ojos.

- Eh…- musitó en voz baja – que te duermes…

Sin apartarme de su pecho abrí los ojos. No me atrevía a mirarle. Mi corazón era demasiado vulnerable como para enfrentarme a su mirada y no morir ahí mismo.

Shamu me levantó cara, cogiéndome la barbilla con una mano y obligándome a mirarle. Mis ojos le evitaban. Sentía miedo, vergüenza, temor… y amor.

- Eh….oye…Thais...

Me atreví a levantar la mirada sabiendo que podía arrepentirme de hacerlo. Mis ojos se quedaron clavados en su mirada. Shamu sonreía iluminando su cara. Su perfecta, bella y varonil cara. Tragué saliva. Dios..quiero morirme.. si no me besa ahora mismo creo que me caeré aquí redonda….

- Disfrutabas tanto que he tenido que sacarte a bailar. Sabes que cantas de escándalo? No te había oído nunca y tienes una voz preciosa.

Sonreí mirándole. Apenas era capaz de balbucear una palabra.

- …si?...
- Ya te digo. Sabía que hace años que estudias música pero tu voz es impresionante.

Lo sé. Canto desde niña. Pero… me vas a besar o no?

Le miraba rogando y suplicando con mi mirada que me diera un beso. Necesitaba sentir sus labios…sí...por fin...…Shamu se inclinó acercándose a mis labios, mi corazón dió un vuelco, seguía mirándome pero… de repente me apartó bruscamente y con gesto algo rudo, alejándose, farfulló malhumorado:

- Anda, vamos a poner la mesa y comemos ya, te parece?



"A dónde irán los besos que guardamos, que no damos."