Chicas a mí estos temas siempre me duelen. No es sólo por empatía. Yo soy el arcoiris de mis viejos. Soy la tercera y última de dos hermanos varones. El del medio se ahogó con el cordón umbilical en la semana 38 y nació muerto. A los 3 meses mi mamá volvió a quedarse y yo nací casiii para lo que hubiera sido su primer cumpleaños (ni una semana de diferencia al menos). Cuando era chica siempre le preguntaba a mi mamá si de haber vivido él yo hubiera nacido. Le preguntaba si hubo algo especialmente pensado para mí o si heredé todo, desde cuna hasta padrinos, de mi hermano muerto. Ella siempre me dijo que la idea era tener 3 hijos, ¿pero qué me iba a decir? Le preguntaba también si la fecha de mi cumpleaños le daba alegría por mí o tristeza por mi hermano.
Con el tiempo me di cuenta que no importaba lo que preguntara ni lo que me respondieran. Así como no se puede volver el tiempo atrás tampoco se puede hacer futurismo sobre lo que hubiera pasado. Quizá sus arcoíris hubieran venido al mundo igual si así tenía que ser, por fallar el método anticonceptivo, por lo que sea. Como me pasó con Giulia, que no fue buscada y nunca la imaginé. Nunca se pueden saber esas cosas. Es ponerse un peso encima preguntarse qué hubiera pasado con sus arcoíris si sus otros bebés hubieran vivido. La realidad es que no son cosas que puedan saber o que alguna vez lo vayan a saber, aunque crean que sí lo saben. Desearía que no se agregaran ese peso encima que ya muy doloroso lo que han tenido que pasar.
Les mando un abrazo grandote
Respuesta: En busca de nuestro arcoiris
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