Gracias a los avances en la ciencia, con la ecografía 4d, complemento de la ecografía tradicional 2d y 3d, al ser tridimensional se pueden ver detalles del bebé que antes nunca se podrían haber visto como facciones del bebé, gestos y todo movimiento como el parpadeo o la succión pero por sobre todas las cosas se valora el estado de todo su cuerpo además de contar con la posibilidad de medirlo con precisión a fin de tener un diagnóstico prenatal más exacto y estudiar su actividad motora.
Esta ecografía es tridimensional y complemento de la ecografía 2d o tradicional, ya que con la ecografía 2d se pueden observar los órganos internos del bebé, con la 3d se detectan malformaciones y con la 4d se puede observar todos los detalles siempre y cuando la placenta o el cordón umbilical no obstruya esa visión.
En el año 2002, durante el Simposio Internacional sobre Medicina Materno-Fetal, organizado en Barcelona por la Fundación Santiago Dexeus Font, el doctor Kutjak expuso que publicó en Journal of Perinatal Medicine los resultados obtenidos en 98 pacientes.
Según el doctor Kutjak en la semana 7 se puede apreciar el primer movimiento de la cabeza, en la 8 el primer movimiento de las extremidades y los movimientos complejos podrán apreciarse entre la 10 y 12, con esta técnica se estudia la vascularización, el comportamiento del feto según el humor de la madre y si el embarazo es gemelar puede observarse la interacción de los fetos.
Si bien esta ecografía puede realizarse en cualquier momento del embarazo porque el bebé está formado con excepción de sus pulmones a partir de la semana 11-12, desde la semana 12 a 16 se podrá ver cómo se relaciona con su medio ambiente es decir el útero, líquido amniótico y cordón umbilical, su estructura será delgada y con poco tejido celular subcutáneo. De la 16 a la 20 se podrá conocer el sexo del bebé, su rostro va tomando su particularidad. De la 20 a la 24 se lo podrá ver abriendo los ojos, bostezando, sacando la lengua o durmiendo, al haber crecido no se lo podrá apreciar en su tamaño completo sino por sectores.
Por lo general, si se va a realizar una sola ecografía, se opta por realizarla en la semana 24 a 32, una vez que el bebé está muy bien formado y no encajado para poder observar todos sus detalles, De la 32 a 38 las características de su rostro serán las mismas que al dar a luz, se podrá ver solamente cara, manos y sexo a raíz de que por su tamaño no es posible captarlo mejor . Esta práctica no condice ningún riesgo para el bebé ni para la madre, de hecho puede realizar cuantas se desee.